Ciudad Juárez. – El supuesto sindicato que estalló una huelga en la maquiladora Akwel no fue formado por trabajadores de la empresa y los amedrentó para que firmaran, se mencionó hoy en una rueda de prensa encabezada por Isela Molina Alcay, presidenta de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra) Juárez.
Explicó que, en mayo de 2024 un grupo de personas, ajenas a la empresa, solicitaron una Constancia de Representatividad en favor de un sindicato denominado “Sindicato Nacional de Trabajadores y Empleados Especializados, Conexos y Similares de la República Mexicana”, con afiliación a la Confederación de Trabajadores de México (CTM). A través de dicha petición, este sindicato, que no tiene relación alguna con la CTM (que es nacionalmente reconocida) manifestó contar con 600 trabajadores afiliados, exhibiendo en conjunto, firmas de supuestos trabajadores que se adherían a dicha solicitud.
“Es importante mencionar que estos trabajadores de Akwel manifestaron su inconformidad y molestia, toda vez que este grupo de personas (que se ostentaban como parte del sindicato), los presionaron de distintas formas para agremiarse y firmar el documento; esto con acciones como el acoso y la persecución en sus domicilios y en los trayectos del transporte de personal”, mencionó
Señaló que estas prácticas son totalmente reprobables y atentan contra las libertades y derechos fundamentales de las personas, pues las coaccionan y les limitan el ejercicio de su derecho al trabajo digno.
Ante esto, la empresa decidió participar en pláticas conciliatorias que se llevaron a cabo en el Centro Federal de Conciliación y Registro Laboral y en el Tribunal Federal de Asuntos Colectivos, ambos en la Ciudad de México. Después de estas conversaciones, Akwel decidió no negociar con este Sindicato debido a que el pliego petitorio resulta económicamente inviable para la empresa y resultan desfavorables para el contexto actual: se plantearon recursos para fiestas patronales, viajes a destinos turísticos (sin un fundamento), gastos de representación, entre otros, dijo.
Refirió que ante el fracaso del diálogo y después de 6 aplazamientos, el sindicato decidió estallar la huelga el 15 de noviembre de 2024 a las 22:00 horas, por lo que las instalaciones de Akwel fueron tomadas y señaladas ante la autoridad laboral; sin embargo, sólo acudieron 9 trabajadores de un total de 1000 que tiene la empresa.
De estos participantes en la huelga, 2 de ellos forman parte de la dirigencia sindical que tiene sede en la Ciudad de México, con lo que se confirma el poco respaldo de la base trabajadora frente a este movimiento, añadió.
“Un tema que ha sido agravante del conflicto, que resulta preocupante, es la aparente parcialidad con el que ha actuado la autoridad laboral de la federación, pues ha cometido irregularidades y fallas sistemáticas en la aplicación de la Ley Federal del Trabajo, como la falta de verificación de la autenticidad de las firmas de los trabajadores alegando “buena fe”, lo que ha impedido que se dimensione legalmente la cantidad de trabajadores, que aparentemente forman parte de este movimiento”, señaló.
Actualmente, Akwel tiene sus instalaciones cerradas y esto, dijo, representa distintos riesgos para la ciudad, para los trabajadores y para otros negocios.
